16.2.09

Queremos tanto a Truffaut



El 6 de Febrero Francois Truffaut habría cumplido 77 años. En mi particular homenaje a Cortázar estaba releyendo sus cuentos cuando me encontré con "El ídolo de las cícladas". Y me acordé de Jules et Jim. Ambos textos incluyen una Diosa antigua que simboliza a la mujer, a UNA mujer. Y a dos hombres que acaban hechizados por ella.
En Jules et Jim la figura arcaica es la señal de la aparición de Catherine, Jeanne Moureau.
Qué voy a decir de ellos (más que de la película). La mejor definición que he oído nunca del amor. No el de Hollywood, ni el de los cuentos de hadas. El real y el grande (real por verídico, pero...¿sería un amor así capaz de existir?, ¿alguien podría ser como Catherine por encima de todo?, ¿Alguien apreciaría el valor de una persona como ella, o como ellos?, ¿alguien amaría hasta tal punto de compartir una persona para hacerla feliz?...). Para mi, ellos están por encima de sus personajes y hablan de algo que nunca nadie habló de esa manera tan sincera y generosa. Quizá por eso, como todo el arte, está idealizado y sería prácticamente imposible su existencia, por cosas como el rencor, la desconfianza, el orgullo... ¡Qué verdadera lástima!.



"Los dos amigos viajan a Grecia, donde reconocen en las piedras admiradas los rasgos de las mujeres conocidas. Ocasionalmente encuentran a Albert, pintor, viajero solitario quien les muestra en un sitio arqueológico un busto representando una figura femenina de inquietante belleza cuya “sonrisa arcaica” los emocionó. “No volvieron a hablar de ello hasta el día siguiente; ¿habían visto alguna vez esa sonrisa? - Nunca - ¿Qué harían si la encontrasen un día? - La seguirían."



En el "Ídolo de las cícladas":

"No hay palabras para eso, por lo menos nuestras palabras"

"Somoza le confiaba su insensata esperanza de llegar alguna vez hasta la estatuilla por otras vías que las manos los ojos y la ciencia..."


4 comentarios:

Joselu dijo...

No he visto Jules et Jim. La versión que tengo es en francés y mi escaso dominio de esa lengua me la hace inabordable. Pero eso sí, hace dos días, vi con mi hija de nueve años El niño salvaje, y lo hice a través de la mirada inocente de ella que quedó cautivada por la historia de este niño educado en la naturaleza y reeducado en la civilización ilustrada. Me has dejado unas enormes ganas de ver la película que citas. Truffaut está entre mis directores más estimados. Un cordial saludo.

Anónimo dijo...

Y como no lo vamos a querer siendo como fue uno de los directores que más abundó en desmitificar el amor. Ese mirada suya tan particular y con la que tan de acuerdo estoy, me recuerda a algunos personajes de Boris Vian.

rubén dijo...

Ya hace tiempo que tengo ganas de volver a verla. Deliciosa.

Anónimo dijo...

Hola Silvia:

También me dan ganas de volver aver esta película.

Hace poco vi la película Fahrenheit 451, basada en la novela de Ray Bradbury.

Besos.

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