25.11.06

Al tonto Rafael

¿Quién aquél?, el tonto de Rafael. Ese del que la gente se rie, ese fracasado en todo que avanza por el mundo a trancas y barrancas, con sudores y resbalones. Ese al que todo se le cae, ese temeroso de una mala palabra, no oida, sino dicha. El que se arrastra como el agua de un día de lluvia para confundirse con el suelo aún a costa de que le pisen. Ese que no se cree nada, que no espera nada y sólo ama. El que tiende la mano indiferente del resultado, por tender la mano, incorruptible, invariable y eterna. El que se crece en la soledad y la desgracia. El estúpido incapaz de matar una mosca, sin personalidad, simple e inexistente para los demás. A todos ellos, mi admiración y veneración eterna. Por ser humanos. Por ser buenos. Por no participar en ningún concurso. No estáis sólos. Alguien cree que sois la pura falta de hipocresía porque todos, al fin y al cabo, somos fracasados disfrazados. Por los valientes, con coraje, personalidad, ánimo y bondad para mostrarse como son y, aún así, amar.




Por las calles, ¿quién aquél?
¡El tonto de Rafael!
Tonto llovido del cielo,
del limbo, sin un ochavo.
Mal pollito colipavo,
sin plumas, digo, sin pelo.
¡Pío-pic!, pica, y al vuelo
todos le pican a él.
¿Quién aquél?
¡El tonto de Rafael!

19.11.06

Comparativa de "Sway"... por decir algo

Peter Cincotti era una promesa cumplida desde hace muchos años, algo increíble teniendo en cuenta sus 23 añitos. Niño bien neoyorkino con look "jazzero", una voz rasposa y algo nasal, pero con las mejores dotes jazzísticas. Un genio interpretativo, que le da un aire nuevo a los estándares del jazz y pop, pero siempre personal y trabajado. Creaciones que suenan a underground, a blues, con pocos espectadores pero que gusta a todos. Ha logrado acercar el jazz más puro y ortodoxo a los nuevos gustos y generaciones.

Peter Cincotti - Sway (Live)




Nacido en 1975 el canadiense Michael Bublé canta tipo Sinatra con tufillo de "Il Divo", producto comercial al mejor estilo "Risto" de OT. Pero no podemos negarle una voz como pocas, bonita-bonita, que él cree consecuencia de un resfriado infantil. Da igual. Nos gusta verle, oirle, aunque demasiado almidonado quizá para el gusto de algunas y algunos, sin que eso impida el despertar de los furores uterinos con ese movimiento tan poco suyo, más bien de Forrest Gump, pero claro, no es lo mismo...

michael bublé - sway



17.11.06

¿El fin de las esperanzas?

A partir de ahora voy a escribir más. Lo voy a necesitar.
Es muy fácil ser optimista a los quince años. Estoy rodeada todos los días de personitas que creen que serán algo importante, que piensan que es obvio que serán felices, que te dicen con toda desfachatez que las desgracias les pasan a los demás, a ellos nunca. Y lo tienen tan claro como que el agua es agua. Para ellos el mundo será una especie de parque de atracciones en el que les queda mucho por disfrutar y el riesgo será para otros, ellos son inmunes a cualquier peligro, porque son ellos.
Es muy difícil tener esperanzas a partir de ciertas edades. Todo se tuerce, nada sale realmente como esperábamos, ni de cerca. Un día nos levantamos y nos damos cuenta de que ya estamos acostumbrados a no hacer nada para salir de la mediocridad, ya no nos sentimos mal por ver realitys o por perder el tiempo en distracciones inútiles. Ahora mismo cualquier distracción se agradece, cualquier amigo y cualquier sonrisa. Aprendemos que vivir es apreciar las cosas pequeñas, y que si queremos ser mínimamente felices no podemos pedir mucho. Pero estamos en una edad en la que todavía no sabemos cómo. Es el momento en el que sabemos que no vamos a conseguir lo que queremos, pero no podemos evitar seguir pidiéndolo.

12.11.06

El disimulo

Los amigos van y vienen a lo largo del tiempo, y otros no vienen ya. Pero si son de los buenos y de los viejos, esos van y vuelven, siempre vuelven. Este fin de semana he estado con amigos que hacía tiempo que no veía. Y, para mi sorpresa, éramos los mismos. Parecía que el tiempo no había pasado. Hablábamos de lo de siempre, con los mismos gestos, las mismas preocupaciones... Y charlando con una amiga me dijo: Silvia, cuando somos más jóvenes creemos que el paso de los años nos hará, como por arte de magia, más responsables, resignados, adultos, seguros, maduros... Y no. Estamos igual y somos lo mismo. Parece que son los demás los que se hacen adultos, y nosotros, simplemente, disimulamos.

9.11.06

Orientalidad comercial

Qué casualidad, estoy leyendo "La esposa del dios del fuego", y he visto "Memorias de una Geisha". ¿Casualidad porqué?. Bueno, además de ir sobre orientales y estar hecho por americanos, va de lo mismo. Muchachas que desde niñas pierden sus padres y son muy, muy desgraciadas. Hasta que aparece el muchacho que las libera de todas las desgracias, las ama y las hace muy felices. Y comen perdices. En ambas hay dos historias que, perdonad que lo diga, no se lo cree ni Panete. En una, ella es una niña de 9 años, está llorando en un puente y viene un joven y apuesto hombre que le compra un helado riquísimo y le da los dos o tres consejos de su vida, convirtiéndose así en la única persona que la ha tratado con cariño y, por ende, en el amor de su vida. Años después, se encuentran, y resulta que ambos estaban enamorados y buscándose todos esos años... Perdone usté, ¿amaba a una cría de 9 años?, entonces no es una historia romántica, es sobre pederastas. ¿Se acuerdan los dos toda su vida de un heladito y una niña?, lo siento, no me lo creo. La otra tampoco se queda corta. Una mujer está casada con un hombre que la pega. Van a una fiesta y charlan con un americano. Hasta aquí, bien. Bueno, pues cinco años depués él resulta que la ha estado esperando y buscando todo este tiempo. ¡Si no hablaron prácticamente nada¡. Un hombre amable, atractivo, rico... No tenía nada mejor que hacer que perseguir a una casada fea...¡enga ya¡. En fin, que la orientalidad se utiliza en Hollywood y sucedáneos para dar un toque más comercial y pastelón a las historias de siempre, chico encuentra chica, chica encuentra chico. Con la diferencia de que en Oriente las chicas son muy, muy desgraciadas hasta que "él" no llega. Qué lástima.

7.11.06

Oda a la desidia

Me he levantado temprano, me acostaré tarde y en medio... nada. Qué fácil es perder el tiempo. Se va, y muchas veces no encuentras nada interesante que lo llene, bueno, a veces, ni interesante ni aburrido, simplemente nada. Me irritan los días en los que no trabajo mucho. Cuento los segundos muertos y cada uno que pasa aumenta mi irritación. Necesito hacer algo. Estudio, juego al tetris del móvil. Llamo a los amigos (no mucho tiempo, que también me irrita), voy a ver cosas, me fijo en detalles, pienso en planes para el fin de semana, cómo voy a decorar mi piso, qué colores voy a poner... Después de todo, pensándolo bien, he hecho más de lo que creía. Pero sólo se me ha quedado una cosa. En un hipermercado, viendo libros, cogí uno y lo ojeé. Al comienzo de un capítulo leí: "Si no puedes cambiar de destino, cambia de actitud".

2.11.06

Gracias, Carlos, muy bueno

-Dices que conociste a John en un ascensor, y mi pregunta es: ¿subía o bajaba? Esto es muy importante porque, cuando bajamos en un ascensor, siempre tenemos una sensación de vacío en el estómago que a veces puede confundirse con amor. En cambio, si subía, se trata de un caso claro de flechazo a primera vista, y también demuestra que John es un joven en período de ascenso. (De una carta a su hija Miriam)

-¿No es usted la señorita Smith, hija del banquero multimillonario Smith? ¿No? Perdone, por un momento pense que me había enamorado de usted.

-No piense mal de mí, señorita, mi interés por usted, es puramente sexual.

-Todo lo que soy se lo debo a mi bisabuelo, el viejo Cyrus Tecumseh Flywhell. Si aún viviera, el mundo entero hablaría de él. -(Periodista) ¿Por qué? -Porque si estuviera vivo tendría 140 años.

-Estos son mis principios. Si a usted no le gustan, tengo otros.

-El puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar. Es realmente un idiota.

-Nunca olvido una cara. Pero en su caso, hare gustoso una excepción.

-Claro que lo entiendo. Incluso un niño de cinco años podría entenderlo. ¡Que me traigan un niño de cinco años!

-Una mañana me desperte y maté a un elefante en pijama. Me pregunto cómo pudo ponerse mi pijama.

-Es mejor estar callado y parecer tonto que hablar y despejar las dudas definitivamente.

-Bebo para hacer interesantes a las demás personas.

-Detrás de cada gran hombre hay una gran mujer. Detrás de ella, está su esposa.

Groucho Marx