1.7.08

El destino llama a tu puerta, España.

Estamos en crisis, pero qué felices hemos sido los españoles por unos días. España campeona de Europa (sólo nos queda Argentina y Brasil para comernos el mundo). Ahora esos 23 jugadores son nuestros colegas, y el entrenador un Dios. Nos olvidamos de cuando los criticábamos por no poner a Raúl, cuando los jugadores se iban de juerga, que nunca pasamos de cuartos... Lo que mejor lo define es lo de "HAN vuelto a perder", "HEMOS ganado la Copa".
Por mi parte me alegro de ver a un portero humilde y bueno como es Palop poniéndose la camiseta de Arconada cuando le metió el gol Platini. O Sergio Ramos con la bandera de Andalucía y una foto de Puerta (qué lástima, habría estado ahi). Me ha hecho gracia el show de Reina, poniendo a cada uno sus motes, el chinito, el guaje, el empanao, el remos... El comentarista de turno hablando de los nombres tan españoles que había (Cesc, Iker, Carles, Xavi...). Éste último huyendo de los medios para no tener que decir "Viva España". Las viñetas humorísticas donde Ibarretxe se plantea ahora si hacer el referéndum separatista.
De todas formas, la vida es curiosa. Toda España, asada de calor, hasta las tantas vestidos de rojo, con banderas y bufandas, tocando el cláxon. Y siempre algo que te recuerda, cuidado, la vida está aqui. El día del partido contra Italia, justo en la prórroga, sonó un golpazo. Mientras pensábamos qué podía haber sido se oyeron los chillidos y lloros de un niño. Entonces sí que nadie pensó y todos salimos a la calle corriendo. Pero todos es todos. Las tres calles que lo escucharon. Con o sin partido. Dos coches habían chocado, a una pareja la tuvieron que llevar al hospital en ambulancia, y el niño que chilló fue del otro coche, más que nada por el susto. El conductor que se llevaron en ambulancia preguntaba si le había pasado algo al niño. Y el padre ayudando a la pareja. Parece como si alguien o algo nos hubiera agarrado y nos hubiera dicho, eh¡, que a todo bueno le acompaña siempre algo malo. Por si no habíamos entendido bien la lección en la final de nuevo la llamada del destino (qué bien quedaría ahora la quinta de Beethoven). En mitad del partido, de nuevo, llamaron. Una mujer embarazada de dos meses acababa de abortar. Mientras toda España saltaba de alegría, alguien perdió un hijo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Te recomiendo el mejor reportaje que se ha hecho sobre la fiesta en la Eurocopa, en la Plaza de España de Barcelona: Míralo aquí: Fiesta en la Plaza de España de Barcelona

Anónimo dijo...

Qué cosas, mientras estás inbuido en el éxtasis de la victoria, no nos damos cuenta que la vida sigue, que hay más cosas aparte de ese partido que a ti te gusta, en fin, ojalá pudiéramos estar siempre en una nube

Martín dijo...

Antes que nada, quedemonos con el festejo. Sea dicho de paso, los españoles vienen arrasando: eurocopa, mundial de basquet, F1, un tal Nadal... en fin... beso grande señorita!!

pd: Si, Waits es ENORME!!!

Rodolfo N dijo...

Cierto la vida sigue...
Pero un momento, un instante de alegría, porque habría que negarlo?.
Aqui nos alegramos mucho por el triunfo de España, pero obviamente no nos paso desapercibido la ingratitud de sus gobernantes respecto de los inmigrantes.
La vida es así, chispazos de alegría, ingratitudes que duelen tanto...
Es hermoso ver reir ,aunque sea un instante , a mucha gente

Fernando García-Lima dijo...

Vaya, no esperaba este toque deportivo en tu blog, con elemento trágico incluido...

Un beso

Diego dijo...

Memento mori, amiga. (Recuerda que morirás). Y gracias por tu comentario. Saludos.