3.9.05

Si existe Dios tiene un sentido del humor muy negro

Si hubiesen tenido otra vida, en la siguiente reencarnación, se hubieran conocido. Pero ahora eran marginados y cada uno estaba en una línea de combate. Sin dinero para vislumbrar un futuro, ni para moverse de su chabola inmunda. Compartían los mismos deseos, los mismos sueños, en los que siempre volaban lejos de su lugar. A la misma hora del día, y ante el mismo sol se quedaban solos, acariciaban con sus dedos lo que quedaba de pared, y mirando al techo suspiraban sin encontrar una sola brisa de aliento. Imaginaban que huían, que tenían la misma vida de las películas, que se encontraban y que eran libres juntos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Si existe Dios, yo, no quiero conocerlo. Prefiero quedarme "a la misma hora del día, solo, ante el mismo sol acariciendo con mis dedos lo que queda de pared".

E imaginar que ese si es el verdadero dios. La imaginación.

tipodeincógnito dijo...

El problema del celuloide es que suele ser demasiado atractivo. quién no ha deseado alguna vez una vida de hora y media con decorados en cartón piedra y besos con música de fondo. Debatir sobre la existencia de la divinidad es ocioso -cuando no trivial- pero entre la segunda y la tercera cerveza no hay mejor tema de conversación.

simalme dijo...

Marco-Terremoto, estoy de acuerdo contigo, como ,por ahora, siempre. Soñar e imaginar hace que la caída sea aún más alta, pero nos mantiene por momentos en las alturas.
El que clavó un clavito: Estoy de acuerdo, el post es cursi, pero por ahora no estoy borracha...todavía.
Infinitas gracias por escribir a los dos, es todo un honor y una alegría.